Si comparamos la importancia de la limpieza diaria de la licuadora con alguna otra actividad humana, podría decirse que a la que más se asemeja es la conquista. Dedicación, cuidado al detalle, constancia y lo peligroso que puede resultar para la integridad física o emocional de una persona, son similitudes que condicionan estas prácticas pero que, por lo menos para el caso del aseo del electrodoméstico, tenemos varias soluciones para ti. Para conquistar, aún no
Paso 1
Puede resultar muy obvio, pero con el ritmo de vida actual, no está de más recordar que lo primero que debemos hacer es asegurarnos que la licuadora debe estar apagada y desenchufada. No vaya a ser que en medio del proceso de limpieza se encienda por accidente.
Paso 2
Si vas a realizar una limpieza profunda, recuerda que nuestra licuadora Optimix Plus 2v todas sus partes son desmontables para facilitar su limpieza. Así, puedes aceitar con comodidad el motor, pasarle un trapo un poco humedecido por la superficie exterior y extender su vida útil. ¡Ojo! el motor no debe recibir agua.
Paso 3
El vaso requiere una indispensable limpieza luego de cada uso, así evitamos que las bacterias se acomoden en el interior. Licuar por 30 segundos a máxima potencia agua, jabón y un poco de bicarbonato, puedes lograr un buen lavado. Deja reposando esta mezcla unos 8 minutos… enjuaga la licuadora y listo.
Paso 4
Las aspas o cuchillas merecen un especial cuidado debido a lo peligroso que puede ser su manipulación, por eso es ideal realizar el proceso de limpieza cuando ya esté desarmada la licuadora, cogerla por la base y tomar un cepillo con un poco de jabón de platos, refregar con un poco de agua hasta quedar relucientes.
Como no todo es tu responsabilidad, es indispensable contar con una licuadora de calidad, que permita que tus cuidados se vean reflejados en la vida útil del producto; por eso se recomienda el uso de la Optimix Plus 2v por su acople en policarbonato hace que sea más resistente, duradero e irrompible.